En el servicio que llevo a cabo como Terapeuta Emocional con Atención Personalizada y Online, procuro adaptarme en la medida de lo posible a las necesidades en relación a horarios y también, si la modalidad se prefiere la presencial o la online.

En los nuevos tiempos cada vez es más frecuente esta segunda opción ya que ofrece mucha comodidad y se adapta a la situación del Covid-19, sin embargo, si tu deseo es hacer un encuentro presencial, seguiremos todas las normas y medidas para respetar el cuidado a la salud.

Mi forma de trabajar en la orientación personalizada y en la terapia educativo-emocional, se basa en un trabajo con tres etapas importantes, que se trabajan de forma más o menos simultánea, con el propósito de ir avanzando hacía aquello que deseamos conseguir.

• La primera está vinculada a la calidad en la acogida, comprensión, consuelo y en crear vínculo de confianza, sin el que entiendo no puede prosperar un trabajo satisfactorio, ya que estos son elementos imprescindibles en una cuestión tan intima y delicada como dejarnos acompañar en momentos de dificultad.
• La segunda etapa se caracteriza por empezar a aprender nuevas estrategias y recursos, y entrar en contacto con un conocimiento terapéutico que nos permita educar la mente. Al interiorizar la información terapéutica, se abren procesos mentales que nos permiten realizar nuevas conexiones sinápticas, que construyen una nueva red en nuestra mente, y de este modo, se pone en marcha una energía diferente, acorde con nuestros deseos. Por lo tanto, diseñamos hacia donde queremos ir, qué deseamos mejorar, cual es nuestra meta o propósito y en base a todo ello, se van tomando nuevas y buenas decisiones que nos hagan sentir protagonistas de nuestra vida y acercarnos a lo que de verdad queremos conseguir. Es decir, a avanzar y alcanzar nuestro modelo de éxito.
• Por último, y como tercera etapa, se trata de llevar a la práctica el plan de acción diseñado en el punto anterior para conseguir un cambio real en nuestra personalidad y vida cotidiana.